Curuzú: Los Remates ponen a los pequeños productores a la par de los grandes

Con un encierre de 1330 cabezas de ganado de 70 productores, se llevó a cabo en Curuzú Cuatiá una nueva jornada de los ya tradicionales remates destinados a pequeños y medianos productores organizados por el Instituto de Desarrollo Rural, con el auspicio del Ministerio de Producción y el apoyo de la FUCOSA, el SENASA, el INTA y los municipios donde se desarrollan.

 

Tras una convocante semana de venta de hacienda en las localidades de Ituzaingó, La Cruz y Viraroso, que contaron con la presencia del Gobernador Gustavo Valdés, las actividades organizadas por el Instituto de Desarrollo Rural se trasladaron al sur provincial, zona históricamente ligada a la producción ganadera para concretar el remate en Curuzú Cuatiá.

En el predio de la Sociedad Rural se cumplió lo previsto: previo a la compra y venta, se compartió un almuerzo de camaradería donde entregaron distinciones a los productores por la distancia recorrida para llegar al remate, la mujer productora, el productor más longevo, el de mejor hacienda, etc. El acto contó con la presencia del secretario de de Agricultura y Ganadería, Manuel García Olano, y el intendente local, José Irigoyen.

Estos remates forman parte del Sistema de Comercialización para pequeños y medianos productores ganaderos y que incluye el pago del flete, la comisión de la casa rematadora y el alquiler del predio donde se realiza, por cuenta del Gobierno provincial, con lo cual el productor obtiene el 100% del precio de venta de su hacienda.

La modalidad de remates para pequeños productores fue encarada desde la primera gestión del ex gobernador Ricardo Colombi y se ratifica en la gestión de Gustavo Valdés para solucionar el problema de comercialización de pequeños ganaderos, que hasta entonces no contaban con precios de referencia al vender sus animales, por lo cual los compradores que acudían a su chacra al momento de la venta imponían las condiciones, el precio, el momento de entrega, la categoría y pago de cada operación, con las consecuentes pérdidas en la rentabilidad del productor.

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