Corrientes presentó ante el CFA el desarrollo de las actividades productivas durante la pandemia por el covid-19

 

Convocado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y encabezada por su titular el Ing. Luis Basterra, el ministro de Producción, Ing. Claudio Anselmo, participó de la primera ronda de reuniones sectoriales del Consejo Federal Agropecuario (CFA), encuentro realizado en forma remota y en el que presentó un informe sobre cómo se desarrollaron las actividades productivas en la provincia durante la emergencia sanitaria por el covid-19.

 

El titular de la cartera productiva provincial participó en su rol de integrante de la Región NEA junto a sus pares de Chaco, Misiones, Formosa, Misiones y Entre Ríos; al tiempo que también formaron parte los representantes de las otras cuatro comisiones regionales correspondientes al NOA, Centro, Cuyo y Patagonia. Junto a Basterra y su gabinete, también participaron los responsables del INTA, el Senasa, y la directora ejecutiva del CFA, Roxana Blasetti.

Tras su exposición, el titular de la cartera productiva realizó planteos puntuales por Corrientes como lo son la demora en la llegada de fondos para el sector tabacalero, centralizados en la Caja Verde y el FET (Fondo Especial del Tabaco). Junto a sus pares de Entre Ríos y Misiones, coincidieron en manifestar su preocupación por la situación del sector forestal, el más afectado por la pandemia en virtud de que no pudieron comercializar su producción para el rubro de la construcción. También manifestaron su preocupación por los efectos que puede acarrear la bajante histórica del río Paraná.

En la convocatoria de las rondas, realizada el pasado jueves (7 de mayo) en la modalidad virtual, el ministro Anselmo hizo un detallado informe de las acciones desplegadas por la Provincia en este período de emergencia sanitaria, cuando en su inicio se priorizó la generación de herramientas que permitan producir y la circulación. Considerada como una actividad “esencial” en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) Nº 297/2020, se puso a disposición de los productores de una Declaración Jurada (DDJJ) que facultaba la actividad productiva, y que podía ser descargado de la página web del Ministerio de Producción.

Desde la cartera se inició paralelamente una campaña de prevención para evitar posibles contagios, consistente en medidas sanitarias dirigidas puntualmente a los que tienen a su cargo cosecha y empaque, para la concientización sobre prácticas fundamentales para la correcta manipulación de alimentos e higiene personal para la cosecha y empaque. También, con características similares, la misma campaña fue dirigida a los operadores del Mercado Frutihortícola de Corrientes.

 

La situación provincial

El ministro expuso la situación provincial de la producción primaria, centrándose en las seis las principales cadenas productivas que en “su mayoría pudieron continuar porque desde el principio estuvieron exceptuadas”; y también otras actividades esenciales como “la alimentación que tienen un impacto importante en nuestra provincia”. “El resto de las actividades primarias que tenemos fueron siendo habilitadas según las distintas decisiones, y estamos con todas prácticamente habilitadas, trabajando con bastante normalidad”, comentó.

-Ganadería: es reconocida como “fundante” de la actividad agropecuaria de la provincia, ocupando prácticamente de 2/3 del territorio con 6 millones de hectáreas, un rodeo de casi 5 millones de cabezas, y con un producto bruto geográfico muy importante ya que “aporta el 50 % del valor bruto” de la provincia.  Con este panorama, los principales desafíos que se tenían con la cuarentena eran dos.

En primer lugar, la meta fijada fue la de concluir con la primera vacunación antiaftosa 2020 iniciada el 16 de marzo, y que era “clave terminar con normalidad esa campaña en una provincia donde somos productores y criadores de terneros”. En una actividad que tuvo su prioridad junto a SENASA y FUCOSA, según informe de la citada fundación, al 30 de abril fueron vacunadas unas 3.560.000 cabezas, que representan un 75 % del rodeo -3% por encima del registro del año anterior a la misma fecha-, y con la salvedad de que las explotaciones más importantes ya han cumplido con la vacunación.

El otro aspecto que preocupaba era mantener los despachos de hacienda, tanto para invernada como faena, dentro y fuera de la provincia, cosa que se logró sin mayores inconvenientes. Todo teniendo en cuenta que el movimiento anual ronda el millón y medio de cabezas por año, “el objetivo de mantener en movimiento la hacienda se está cumpliendo y prácticamente con normalidad”, aseveró el ministro.

“Este es un primer paneo de lo que es la situación de la actividad ganadera que por lo menos pudimos mantener sin demasiados problemas y cumplir con los dos objetivos que nos propusimos: cumplir con la vacunación antiaftosa y el movimiento de hacienda”, dijo Anselmo. Reconoció apenas algunos problemas al inicio de la cuarentena con la circulación y el traslado de trabajadores, inconveniente “que fue rápidamente solucionado”, sin dejar de lado que el factor clima también ayuda en el corto plazo para toda esta logística, aunque no deja de preocupar esta “sequía otoñal”.

La suspensión de los remates ganaderos convencionales dificultó la comercialización de terneros de esta zafra, pero existe buena demanda y los precios están firmes.

El mayor problema es que los costos de producción han subido por efecto inflacionario y brecha de tipo de cambio (suplemento mineral, fertilizantes, agroquímicos) afectando la rentabilidad, salvo en los modelos más eficientes de producción.

El Gobierno Provincial (Idercor y Ministerio de Producción) comenzó en marzo, en Mercedes, con los Remates de Pequeños y Medianos Productores, que por la cuarentena se continúan con la modalidad televisada, con buenos precios en el realizado en abril en la costa del río Uruguay (La Cruz).

-Arroz: la actividad viene desarrollándose bien y en plena zafra, superándose ya el 90 % de la superficie cosechada, con buenos rendimientos y buena en calidad del grano en general. La cosecha, de aproximadamente 85.000 hectáreas, ya culminó en el Norte y está muy avanzada en el Centro-Sur y en la Costa del Paraná. “El arroz ha tenido una buena zafra, mejor en comparación del año anterior y con un mejor panorama de precios tanto en el marcado interno como internacional”, dijo el ministro.

Tanto el mercado interno como internacional presentan alta demanda (Vietnam cerró exportaciones), lo que generó subas de precios tanto de arroz cáscara como elaborado. Los principales limitantes para próxima campaña son la escasez de humedad y reserva de agua en represas; y los altos costos de producción respecto a países competidores.

-Citrus: con 30.000 ha del cultivo en la provincia y con epicentro en las dos cuencas del Paraná y el Uruguay, ya ha comenzado la época de la zafra que se inició con la variedad temprana de mandarina, luego con la de naranja y en breve con la de limón. “La realidad es que hoy lo que está sosteniendo la actividad es la fruta fresca para el mercado interno, con muy buenos precios, y hasta piensan que la cuarentena los favoreció porque se consume más por las recomendaciones de adquirir la vitamina C”, reflexionó el ministro.

Por otro lado, “no está tan bueno el panorama de la exportación”, dijo, tanto el de la fruta fresca como el de jugos. “Lo que más preocupa es la incertidumbre general que hay en el mundo por la pandemia, con puertos cerrados e inactividad en lugares claves para nosotros como el sudeste asiático, el mercado ruso”, explicó. “Hoy las actividades están dirigidas a Filipinas, Malasia y Singapur”, aseguró, y pronosticó que “la previsión para este año es en menores volúmenes que en el año 2019”.

En tanto, estimó que el panorama en la industria de jugos “es bastante complicado”, que ya venía pronunciando una caída del 50 % en el segundo semestre de 2019 a consecuencia de una sobreoferta internacional ante otros países productores como Brasil y Sudáfrica. “Hasta ahora, ese segmento no se ha recuperado”, indicó.

Por otro lado, el ministro le transmitió que hay que prestar “mucha atención con la –posible- dispersión de HLB” -enfermedad que afecta a los cítricos- por el movimiento de fruta de distinta condición fitosanitaria. También se planteó sobre la continuidad del programa de control de la Mosca de la Fruta.

-Horticultura: el sector terminó 2019 con una situación de emergencia agropecuaria por una secuencia de temporales a fines de diciembre, declarada rápidamente por parte del Gobierno Provincial para cuatro departamentos: Lavalle, Bella Vista, Santa Lucía y Goya. “Eso, consecuentemente demoró el inicio de la campaña por la reconstrucción de los tendaleros y la plantación de las distintas especies viene atrasada prácticamente un mes”, explicó.

Hoy los productores están cosechando pimiento y otras hortalizas como berenjena y zapallito”, pero advirtió que “el principal inconveniente es que esta campaña encontró al sector muy descapitalizado, con falta de inversión en el mantenimiento de las estructuras, sumado al problema de la destrucción que trajo la emergencia que afectó a por lo menos el 50 % de los productores”, explicó.

Por otro lado, desde el sector se reporta una buena situación sanitaria en general, quizás promovida por el clima seco en este otoño, y por el otro la muy buena demanda, tanto a nivel local en los mercados de concentración de Corrientes y Chaco como en el Central de Buenos Aires. “Esto también tiene que ver con el cambio de costumbres durante la cuarentena, la gente come en su casa y ha recuperado el consumo de frutas frescas y hortalizas, y en general con muy buenos precios, por lo que hay muy buenas expectativas para la campaña en ese sentido”, relató.

-Yerba mate y té: estos dos cultivos industriales que se desarrollan en la zona de la tierra colorada desarrollan “distintas situaciones”. En lo que hace al té, la cosecha ésta prácticamente terminando y continuó casi sin ser afectada, es de muy poca superficie, de 1.500 ha, es mecanizada, y sin lluvias que influyen mucho en su producción. “La producción estuvo en lo previsto, unas 2.000 tn de té seco, que en su mayor parte se vuelvan al mercado interno”, dijo.

El sector yerbatero, en tanto, con más de 21.000 ha cultivadas según los últimos datos del INYM (Instituto Nacional de la Yerba Mate) y con más de 500 productores, es un actividad industrial que se desarrolla en seis instalaciones de secaderos activas y cuatro molinos. “Tuvo unos días de parate en la última semana de marzo, sobre todo para reorganizar la logística de cosecha porque necesita movilizar mucha gente, mano de obra intensiva, y se reactivó el 1 de abril aunque los molinos siguieron operando normalmente”, explicó Anselmo.

“La buena noticia es que hay una buena demanda de yerba mate elaborada y se espera un incremento del consumo por el efecto de la cuarentena, además de todas las recomendaciones del consumo individual del mate”, comentó. Y especificó: “todavía no contamos con los números oficiales del consumo, pero la demanda es buena”.

Por otra parte, dijo que el aspecto negativo se radicó en que las exportaciones de 2019 cayeron con respecto a 2018, que fue “el año récord de exportación en la última década de exportaciones de yerba mate”. Allí se había alcanzado un volumen de 43.000 tn y precio de cerca de US$ 90.000.000.

-Forestal: se trata del sector más importante de la provincia y con mayor proyección, y que es “sin dudas es uno de los que ha sufrido con mayor impacto esta crisis, no solamente por el coronavirus y esta cuarentena, sino que ya venía golpeado”, dijo el ministro. La provincia ya superó las 500.000 ha de plantaciones, distribuidas en un 70 % de pino y 30 % de eucaliptus, con “unas enormes posibilidades de desarrollo de la industria”.

En Corrientes hoy se industrializa solo una cuarta parte, un 30 % de nuestra producción anual de madera, que está muy ligada al mercado interno y a la industria de la construcción”, y es hoy la actividad “que está en mayores problemas”. “Con la cuarentena se vio suspendida toda la actividad, y al paralizarse aserraderos también lo hizo toda la actividad primaria –cosecha-“.

Sin embargo de a poco se fueron retomando las actividades, primero la de la producción de palets, la cajonería y bases para la industria alimenticia, que “fueron exceptuados luego de unos trámites iniciales”. Luego del 1 de abril, que fueron consideradas como una actividad “esencial”, pudieron ir entrando en funcionamiento algunos de los aserraderos en las distintas zonas.

“La mayoría de las industrias están reactivadas, pero tienen un problema particularmente los que tienen demanda de la industria de la construcción que no la están teniendo, y padecen una importante ruptura en la cadena de pago, que con la falta de actividad bancaria se produjo una serie de cheques rechazados”, reflexionó.

La exportación también estuvo paralizada en el primer tiempo de cuarentena “porque básicamente la Aduana nacional dio prioridad a la exportación de materiales esenciales, pero los primeros días de abril se fueron retomando los embarques de madera”. Sin embargo, al igual que en el citrus, reina “una situación e incertidumbre en el comercio internacional sobre cómo se va a desarrollar la economía cuando todos salgan de la situación de semi parálisis, que seguramente afectarán los volúmenes y los precios”.

“De nuevo, el retorno de las operaciones se están dando también con el sudeste asiático, para China, Malasia, etc.”; por lo que se espera que esa actividad “sea la que motorice nuevamente la exportación hasta tanto se reactive el mercado interno con la construcción”.

El Ministerio de Industria, Trabajo y Comercio ha realizado una encuesta a los aserraderos, al igual que entidades como AFOA y FAIMA, sobre desarrollo actividad durante la cuarentena.