Dotan de agua a una escuelita rural de Mercedes

Una perforación de 120 metros de profundidad -más de una cuadra de extensión- llegó para cambiar la vida cotidiana de un puñado de niños y varias familias. La Escuela Nº 967 proporciona educación primaria completa a chicos de la zona y está situada en el paraje Tororatay, a unos 60 kilómetros de la ciudad de Mercedes. Es una de esas típicas escuelitas rurales, con una docente a cargo que oficia de directora, maestra, cocinera y mamá, ya que por la distancia 6 pequeños -de los 12 que asisten a clases de distintas edades y nivel de instrucción- viven en ese pequeño edificio de lunes a viernes, bajo el cuidado de la “seño” Rita González. Al lugar se accede por un camino vecinal de 6 kilómetros. Todo es campo.

 

El Plan Aguas del Ministerio de Producción, con la maquinaria disponible entonces, había logrado hace un tiempo con ayuda de un privado llegar a los 60 metros de profundidad en busca de agua, pero el suministro era intermitente e insuficiente. Ante un nuevo pedido de la maestra y empleando en esta ocasión la potente perforadora provista por el Ministerio de Agroindustria, se trabajó por 7 días hasta que una explosión de agua y gritos de alegría de los chicos demostró haber llegado al objetivo, a los 120 metros de profundidad.

Además de abastecer a la escuela y su pequeña comunidad, la nueva perforación también proporciona agua a una Sala de Primeros Auxilios y una capilla contiguas. En este caso no se brindó solo una solución. Se está acompañando el esmero de una docente de verdadera vocación y a las familias de esos chicos que se esfuerzan en enviar a sus hijos a la escuela para garantizarles un futuro mejor.